Tipo de fosa: Represión provocada por los sublevados
Fecha: 01/03/1938
Condiciones de acceso:
La fosa existente en término de Antillón se encuentra apenas a unos 500 metros del casco urbano del pueblo, en la llamada Denba Rivera” en una faja de terreno hoy en día cultivada.
La fosa existente en término de Antillón se encuentra en una faja de terreno hoy en día cultivada en la que es imposible hallar la menor señal indicativa de la fosa que esconde en su interior. Contiene los restos de tres militares republicanos -un capitán, un teniente y un comisario- fusilados por los sublevados tras su conquista del pueblo en marzo de 1938. Testimonios orales consultados afirman que antes de su ejecución pudieron ser sometidos a un consejo de guerra en el interior de la iglesia del pueblo.
La fecha de los acontecimientos es aproximada.
Otras víctimas de la represión ejercida por los republicanos: En cuanto a los vecinos de Antillón propiamente dichos, los republicanos asesinaron al menos a dos de ellos: el practicante Nicolás Cebolleros, de Casa Alejos, y Lorenzo Ferrando, de Casa Sánchez. Todavía se desconoce el paradero de sus restos y en su día se dijo que podían haber sido arrojados al famos “pozo de Ventafarinas”, próximo a Tamarite de Litera. También fue asesinado el ecónomo de la parroquia Julio Bescós Torres. Además también pudo ser asesinado en término de Antillón un vecino de Alberuela de Tubo llamado José Antonio Escario.
Otras víctimas de la represión ejercida por los sublevados: Después de la guerra se produjeron diversas represalias por parte de los vencedores y Leandro Buiría Valdovinos fue ejecutado en Huesca en julio de 1940.
Otras víctimas de la guerra en la localidad: Cuatro soldados del pueblo murieron en combate en las filas republicanas: Marcelino Abadías de Casa Castejón, Alejandro Ferrando de Casa Gota, Manuel Abadías de Casa de Javiera, y Andrés Abadías de Casa de Castro de Arriba.